Contra la pared por un levantamiento, una economía hundida y una pandemia incontrolada, el gobierno cubano va a permitir la creación de pequeñas y medianas empresas privadas por primera vez en décadas. Aún así, muchos sectores permanecerán en manos del Estado y los cubanos en el exterior no podrán ser propietarios.
Artículo de El Nuevo Herald en este enlace.